La inteligencia artificial (IA) y más recientemente la llamada inteligencia artificial generativa (IA generativa o GenAI) está provocando un seísmo sin precedentes en el mundo empresarial. Frente a los agoreros que ven la irrupción de esta tecnología como el ‘perfecto’ sustituto del hombre en determinadas profesiones, otros la contemplan como una importante herramienta que impulsará una nueva forma de pensar y de hacer las cosas.
El uso de la GenAI dentro de la empresa se generalizará en unos años. Se estima que entre 2026 y 2030, el 31% de las empresas adopte esta tecnología, según el informe elaborado por Cognizant junto con Oxfords Economics La IA, una nueva era. Y será en ese momento cuando deje de ser vista como una tecnología para la automatización de tareas para convertirse en un componente central de las estrategias de transformación empresarial. En este escenario, las empresas tradicionales deben empezar a pensar en los cambios que deben realizar para implantar la GenAI en el lugar de trabajo y, en última instancia, en sus modelos comerciales y operativos. No se trata de incluir esta tecnología con calzador en los procesos existentes o evaluarla con métricas antiguas, sino de aprovechar realmente el poder de esta tecnología.
Pero ¿cómo hacerlo?
Duncan Roberts, Cognizant Research Associate Director, contempla dos opciones: la primera, que las empresas ya existentes se conviertan en disruptoras desarrollando sus capacidades de IA por sí mismas -o creando una división nativa de la IA; y la segunda, asociándose con empresas nativas de IA. Aunque lo más probable es que se generalice un enfoque híbrido. Es decir, que las empresas establecidas se asocien con empresas nativas de IA, utilicen APIs para llevar nuevos servicios de IA a su propio entorno y disciernan en qué casos es absolutamente necesario construir capacidades de IA por sí mismas.
Sea como fuere lo cierto es que, en un mundo nativo de IA, las empresas existentes deben aprender de estas empresas emergentes cómo introducir la GenAI en sus operaciones. Se trata, en última instancia, de hacer negocios de una manera completamente nueva para seguir siendo relevante en el mercado. Para conseguirlo, las organizaciones necesitarán nuevas políticas de gobernanza, estructuras organizativas y procesos operativos Y, lo que es más importante, también tendrán que replantearse su infraestructura tecnológica para impulsar las nuevas capacidades que ofrecen basadas en la IA.
Descubre cómo Cognizant ayuda a las empresas a asumir este cambio en su forma de pensar y actuar en el informe Cómo pensar y actuar como una empresa nativa de IA
